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La cotización a la Seguridad Social, cada vez más cara

Los costes de cotización a la Seguridad Social suben y suben.

Cuanto más me quieren, más me hunden

Hasta a los políticos más escorados a la izquierda se les llena la boca de bendiciones hacia la pequeña y mediana empresa cuando acuden a cualquier evento empresarial, y no van a pocos.

Pero cuando tienen que tomar decisiones que afectan a los bolsillos de los empresarios la cosa cambia.

Noticia:

El actual Gobierno del Estado prepara un incremento muy importante de las cotizaciones a la Seguridad Social para el año 2019, entre un 10 y un 20%, dependiendo de los casos y de las distintas opciones barajadas, porque todavía no tienen claro cómo hacerlo.

Si tienen claro que el Salario Mínimo Interprofesional va a ascender hasta los 900,00 euros para el próximo año, lo que incrementará el coste de cotización de las nóminas más bajas.

También se ha publicado su intención de incrementar la cotización de los autónomos emprendedores, la llamada tarifa plana, de 50 euros a 75 euros mensuales.

Estas subidas se van a producir en un momento en el que muchos clientes nos piden un informe de costes sociales para conocer cuánto les costaría contratar a alguien en su empresa porque tiene intención de hacerlo, pero al informarles del importe de la cotización desisten y buscan otras alternativas.

He tirado de datos de la Seguridad Social y he visto que un empresario con una Sociedad Limitada en el año 2013 paga de su bolsillo todos los meses una cotización como autónomo de al menos 256,72 euros, en el año 2018 ya vamos por 358,53 euros y para el 2019 va a seguir creciendo más el IPC.

¿Por qué a los empresarios encuadrados en autónomos por tener una Sociedad Limitada se les hace pagar una cotización mínima más alta que a los demás?

¿Se les presupone que tienen más recursos por tener una SL?

¿Por qué a los empresarios se les presupone que disponen de más recursos particulares para contribuir al sistema?

Es una mala e injusta presunción.

A los empresarios se les pide que se formen, que se internacionalicen, que inviertan en nuevas tecnologías, que inviertan en innovación, que destinen recursos económicos a cumplir con la protección de datos, con la prevención de riesgos laborales, con la nueva obligación “comppliance” y, además, que creen empleo con salarios altos, jornadas completas y estable, que motiven a sus equipos de trabajo con políticas de recursos humanos. Y si luego hay que finalizar un contrato y pagar una macro indemnización, pues que la pague.

¿De verdad que hay que seguir presionando a los empresarios y a cambio de nada?

Son los que más dinero gastan en cotización, por ellos y por sus empleados, pero son los que menos rendimiento obtienen por sus cotizaciones cuando van a percibir una prestación de la Seguridad Social.
Sin embargo tienen que complementar con su dinero las prestaciones que obtienen sus trabajadores, por ejemplo, durante una baja médica. Pero ellos perciben peores prestaciones que sus empleados.

Mucha gente no lo sabe, pero desde el Ministerio de Trabajo se está reclamando a muchísimos empresarios que devuelvan bonificaciones en la seguridad que previamente les alentaron a practicarse.
Por ejemplo, les están reclamando que devuelvan ayudas que les dieron por contratar formación para sus empleados, alegando algún defecto burocrático ya no de ellos, sino de las academias que impartieron la formación.
También les están reclamando que devuelvan las bonificaciones aplicadas por crear empleo estable a los empresarios que en los últimos tres años han disminuido el nivel de empleo.
Es decir que encima que has tenido que reducir plantilla, tienes que devolver las ayudas, bonita forma de ayudar a relanzar la empresa.

Responsabilidad social mal entendida.

Nuestro sistema social se sustenta en que el que más tiene más aporta, pero cuánto más pueden aguantar la mayoría de los empresarios la presión a la que se les está sometiendo.
Pero no sólo los empresarios, también los trabajadores con salarios altos soportan año tras año un incremento en la cantidad que se les detrae de su nómina para pagar su cuota obrera de Seguridad Social.

Para el año que viene el actual Gobierno quiere incrementar entre un 10 y un 20% el tope máximo de cotización para que las nóminas más altas coticen todavía más a la Seguridad Social, pero sin embargo apenas van a incrementar la pensión máxima, con lo que por mucho que coticen más no van a mejorar ni un euro su pensión de jubilación.

Estos trabajadores de rentas más altas, el año que viene pueden pasar a pagar 200,00 euros más al mes de seguridad social, que pierden de su poder adquisitivo, además de las altísimas retenciones que ya soportan a cuenta de su renta.

Una vez escuché a alguien decir “cuanto más me quieres más me hundes”.

Algo así está sucediendo ahora con los políticos respecto a los empresarios y la clase media, cuanto más los necesitan y quieren más los hunden.

Pablo Sirera Soler

Fuente de la imagen: www.preguntar.org

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